sábado, 22 de enero de 2011

Psicoterapia y Construcción Social


Reflexiones sobre las sesiones de Psicoterapia y Construcción Social (Continuación)

    Cada cabeza es un mundo. Nunca había pensado en el verdadero significado de esta frase hasta ahora. Cada quien construye su realidad, su propio mundo, su universo particular. Por lo tanto los significados que le damos a determinada cosa o evento puede ser muy diferente para cada persona. ¿Cómo entendernos entonces? A través del lenguaje. Es a través del lenguaje que creamos significados, es en el lenguaje en donde creamos nuestra realidades y así mismo es a través del lenguaje que podemos aproximarnos a significados ajenos. Y digo aproximarnos porque pienso que nunca podemos entender del todo las realidades de los demás, es imposible ponerse en el lugar de la otra persona. Sin embargo se puede crear un espacio donde se construya un lenguaje local que permita entendernos mejor. Este espacio , que no es un lugar físico, se crea a través de las conversaciones. Es por medio de las conversaciones que se puede llegar a construir este lenguaje común que a su vez posibilita el acercamiento a los significados de las otras personas. Es a través de las conversaciones donde el terapeuta puede acompañar al cliente a explorar nuevos territorios, a moverse a otros lugares y entre los dos crear nuevos significados que hagan la vida más llevadera.
Tuve la oportunidad de apreciar esto en el ejercicio de terapia realizado por Rocio con la participación de Sylvia. Una maravillosa oportunidad de presenciar cómo a través del lenguaje, de la conversación, el terapeuta se aproxima a los significados del cliente permitiendo crear finalmente un lenguaje común entre los dos. .
En cuanto a la conversacion misma que se estableció entre Rocío y Silvia lo que más me llamó la atención fuee el tipo de preguntas: qué, cómo, cuándo. Ningún porqué y ninguna pregunta cerrada. Porqué, me preguntaba a mi mismo. La respuesta vino después: las preguntas que hace el terapeuta deben abrir conversaciones, no cerrarlas y esto último es lo que sucedería si se hicieran preguntas cerrradas, y el porqué implicaría que existe una causa y un efecto. Las preguntas deben tener el afán de abrir posibilidades, no cerrarlas.
    Ya para terminar me gustaría comentar sobre un elemento muy importante en la terapia: la curiosidad del terpeuta. La curiosidad genuina que debe sentir el terapeuta para saber más del paciente, la curiosidad que es el sostén de las preguntas que se realizan e impulsa la conversación. Cuando la curiosidad se acaba ya no hay nada que hacer. Nada de que conversar.



martes, 11 de enero de 2011

Psicoterapia y Construcción Social

Reflexiones sobre las sesiones de Psicoterapia y Construcción Social

Un paseo por los paradigmas.
Romanticismo, modernismo, posmodernismo. Acompañados por Rocío Chaveste hicimos un breve recorrido por los principales paradigmas que han regido la vida del mundo occidental en los últimos trescientos años. Con las características de cada unos de ellos podría hacerse un test para saber qué tipo de persona se es: romántico, posmoderno o moderno. Pienso que  en realidad, a pesar de que cada uno de estos paradigmas está asociado a una época en particular, muchas de las características de cada uno  perduran en nosotros en pleno siglo XXI. Tal vez algunos no sean tan funcionales como lo fueron en el pasado pero de una manera u otra siguen alli presentes, para bien o para mal. Todos tenemos de románticos, modernos o posmodernos, y creo entonces que aqui la pregunta  no sería "¿eres romántico, moderno o posmoderno?" sino  "¿qué te funciona más? Pienso cómo a pesar de tratarse del mismo mundo que vivimos y experimentamos, la manera de verlo, de conceptualizarlo lleva por distintos rumbos y posibilidades. Pero lo que me parece más interesante es que no tenemos que estar irremediablemente "casados" con una de estas visiones sino que podemos movernos de una postura a otra. Y el hacer eso nos permite ver nuevas realidades, crear nuevas posibilidades y ser más felices.



Breve comentario sobre mi encuentro con el concepto de posmodernidad.

Cuando inicié la maestría de Psicoterapia en el Instituto Kanankil, sabía que ésta se encontraba inscrita en lo que se denomina Posmodernidad, pero no tenía muy claro  este término. En mis primeras clases empezé a aprender más sobre este concepto y conforme fui asimilandolo en primera instancia me causó cierta angustia: relativismo, inexistencia de una  sola realidad, subjetividad, incertidumbre, son términos que pueden causar angustia en una mente moderna. Si no hay una sola realidad, si todo es relativo, si no hay una Verdad absoluta entonces a que me aferro, pensaba. ¿Que es lo que me haría sentir seguro? 
Recuerdo que fue en las primeras sesiones de esta materia, Psicoterapia y Construción Social, cuando la Posmodernidad empezó a perder su temible semblante y me empezó a mostrar un rostro mas amigable, y al avanzar con las clases me sentí mas cómodo al pensar en ella, y es que me di cuenta que más que un periodo histórico, más que una moda, más que una crítica a la Modernidad, la Posmodernidad se trata de toda una postura filosófica, de una manera de ser. Me di cuenta o mas bien empezé a sentir que no hay porque aferrarse a algo, que al no existir una sola realidad o una sola verdad se abría la puerta a mil posibilidades.  Y lo más sorprendente es que al experimentar esto todo aquello que  me causaba angustia empezó a provocarme otro sentimiento, un maravilloso sentimiento de libertad.

domingo, 9 de enero de 2011

De una Psicología Moderna a una Psicología Posmoderna




Reflexiones sobre la lectura del texto "La Ciencia Psicológica en el contexto Posmoderno" de Keneth Gergen


    Al terminar de leer este texto pienso en dos cosas: la primera, en cómo  se ha ido transformando la metodología y sobre todo la práctica de la Psicología a raíz del surgimiento  de las voces del posmodernismo; y la segunda, la importancia que adquieren el lenguaje y el diálogo en la visión posmoderna de la Psicología.
    En relación a lo primero me refiero a las visiones que brindan por un lado la modernidad y por otro la posmodernidad y como inciden en la metodología y la práctica  de la Psicología. Los supuestos de cada una de estas visiones determinan la manera en que la Psicología lleva sus tareas e incluso replantea cuales son estas tareas. Los pilares de la Psicología moderna como son la centralidad del conocimiento individual, la posibilidad de conocer el mundo de manera objetiva y el considerar al lenguaje como producto de la mente parecen de repente  tambalearse ante la visión posmoderna que pone en tela de jucio estos supuestos. Para la visión posmoderna el conocimiento no se construye de manera individual sino en relación con los demás; conocer de manera objetiva el mundo es imposible ya que el mundo o la realidad se construye socialmente y por lo tanto lo que tomamos como real es un producto de construcciones sociales. Para el posmodernismo el lenguaje no es producto de la mente sino de procesos culturales, por lo que no existe un lenguaje universal, solo lenguajes locales. 
Sin embargo esta vision posmoderna no pretende acabar con la visón moderna de la psicología, no es su afán cancelar todo lo  bueno que la ciencia psicológica ha aportado sino mas bien lo que hace es revitalizarla, refrescarla, invitarla a observar su objeto desde un nuevo lugar. La metodología de la psicología moderna se ha visto transformada, por ejemplo privilegiando más lo cualitativo que lo cuantitativo. Asi mismo han aparecido nuevos métodos basados en  en el análisis del discurso y la conversación, métodos llamados de investigación acción y métodos donde se consideran múltiples perspectivas de un mismo fenómeno. Sin embargo pienso que es en la práctica psicológica donde más impacto ha tenido esta visión posmoderna. Han surgido novedosos modelos de terapia que tienen como punto focal la reconstruccion de significados a través del lenguaje, de hecho una de las preocupaciones de la Psicología posmoderna es la construcción lingúistica de la realidad. 
   Y es esta cuestión de la reconstrucción de significados a traves del lenguaje en  la terapia  posmoderna lo que más me ha llamado la atención. Las terapias narrativas, las colaborativas y gran parte de las sistémicas trabajan bajo la premisa de que las realidades en que vivimos son construidas por medio del lenguaje. La conversacion, los diálogos, son la herramienta primordial para crear nuevos significados y la tarea del terapeuta en la posmodernidad es ser capaz de crear espacios de conversación donde la gente logree crear nuevos significados que le faciliten su vida. Y si como postula el posmodernismo no hay una sola realidad para todos y no existe un solo lenguaje universal sino lenguajes locales, el dialogo resulta fundamental para conocer estos lenguajes locales e incluso para crear nuevos lenguajes locales. La psicología posmoderna trae consigo una revaloracion del papel del lenguaje en la terapia, éste se transforma de una herramienta para describir el mundo en una herramienta para crearlo.